Budapest cuenta con un nuevo servicio de enlace con los puertos marítimos del Adriático
ÖBB Rail Cargo Group (RCG) pone en marcha una nueva conexión ferroviaria de mercancías entre Budapest (Hungría) y Rijeka (Croacia). Se espera que este nuevo servicio beneficie a los flujos de carga en ambas direcciones. Además, también abre el camino al puerto de Koper, al que se puede llegar mediante un corto servicio ferroviario desde Rijeka. Con este enlace, RCG triplica las conexiones con los principales puertos del Adriático, al tiempo que ofrece más opciones para el tráfico ferroviario entre los Balcanes Occidentales y Europa Central a través de Budapest.
Este nuevo servicio, que forma parte de la red transFER de RCG, circulará dos veces por semana entre la terminal BILK de Budapest y el puerto de Rijeka. Además, la compañía austriaca ha abierto recientemente una nueva oficina en Rijeka debido al aumento de la demanda de servicios de transporte de contenedores. Esta oficina, señaló RCG, puede ayudar a procesar estas crecientes solicitudes con mayor rapidez y eficacia.
Hungría, puerta de entrada a los Balcanes y el Adriático
Cuando se trata de encontrar una vía para que Hungría llegue al mar y a los puertos, el nuevo servicio de RCG a Rijeka no es la primera iniciativa. El Gobierno húngaro ha proyectado la construcción de una terminal ferroviaria, denominada AdriaPort, en el puerto de Trieste, que, con Rijeka y Koper, es el más activo del Adriático. La inversión total asciende a 200 millones de euros, 45 de los cuales serán financiados por el Plan Italiano de Recuperación y Resiliencia. Se espera que la construcción dure unos dos años.
Los desarrollos entre Hungría y los Balcanes Occidentales se están acelerando últimamente. Muchas empresas empiezan a explorar el potencial de la península balcánica, como mercado y como puerta de entrada a otros destinos. Como consecuencia, también proceden a inversiones relevantes. Por ejemplo, METRANS está trabajando en la construcción de dos nuevas terminales ferroviarias. Una estará en Zalaegerszeg, cerca de las fronteras húngaras con Austria y Eslovenia, y la otra en Szeged, cerca de las fronteras del país con Rumanía y Serbia. Se prevé que la primera entre en funcionamiento en 2023, mientras que la segunda lo hará en 2025.
Otra nueva instalación, la terminal de Horgos, se construirá en la frontera serbio-húngara para facilitar el transporte ferroviario de mercancías entre la región balcánica y el resto de la Unión Europea. El proyecto está dirigido por Rihard Dobo, Consejero Delegado de Dibex y Roadex Trans, ambas empresas de transporte de mercancías por carretera. La terminal de Horgos contará con cuatro vías de 740 metros de longitud y estará equipada para transportar también semirremolques.
Lea también:
- ¿Cómo puede esta nueva terminal impulsar el transporte intermodal UE-Balcanes?
- Hungría presenta sus planes ferroviarios a la UE, pero faltan proyectos cruciales
- ¿Dónde está el dinero prometido por el Gobierno húngaro?
- Hungría en Trieste: ¿impulsará el papel de Italia en la Nueva Ruta de la Seda?
