El sector ferroviario británico insta al Gobierno a cumplir los objetivos de emisiones netas cero
Tras el lanzamiento de su campaña RailDecarb23, la Asociación de la Industria Ferroviaria (RIA), que representa a la cadena de suministro del sector en el Reino Unido, ha publicado un nuevo documento que reúne las principales ventajas de la electrificación ferroviaria, desde la reducción de costes hasta la disminución de la duración de los trayectos. El documento sostiene que, sin las inversiones adecuadas, no se alcanzarán los objetivos fijados de cero emisiones netas en el ferrocarril.
La Asociación de la Industria Ferroviaria ha cuantificado y descrito los principales beneficios de la electrificación. La RIA señala que los trenes eléctricos son más rápidos y largos, lo que contribuye a los objetivos económicos ecológicos al retirar más vehículos pesados de las carreteras del Reino Unido y, como consecuencia del aumento de la velocidad y la fiabilidad, la electrificación de los servicios de mercancías también mejora la capacidad tanto de los servicios de mercancías como de los de pasajeros.
Mercancías eléctricas hasta el muelle de carga
El documento «Rail Electrification: The Facts» se ha publicado pocas semanas después del lanzamiento de la campaña RailDecarb23 de RIA, que pide al Gobierno británico que actúe ya para que el sector ferroviario pueda eliminar todos los trenes exclusivamente diésel de la red en 2040 y alcanzar el carbono cero neto en la economía en 2050. La primera cifra es casi tan estricta como el objetivo fijado por el gobierno escocés, que pretende eliminar toda la tracción diésel de la red de pasajeros de Escocia para 2035.
Según Noel Dolphin, coautor del informe, «un ferrocarril eléctrico es el método más eficiente para transportar pasajeros y mercancías, lo que en última instancia se traduce en una reducción de los costes operativos a largo plazo». Dolphin es también director de Furrer+Frey, la empresa de matriz suiza que ha desarrollado un sistema de catenaria retráctil diseñado para que las locomotoras eléctricas de línea principal puedan arrastrar sus cargas hasta las zonas de carga de los depósitos de mercancías. «Esto no sólo contribuye a nuestro objetivo fundamental de descarbonización, sino que también allana el camino para una experiencia ferroviaria superior que sea más fiable, rentable y capaz de acomodar una mayor capacidad», añadió.
El ferrocarril desempeña ya un papel crucial en la descarbonización, siendo una pequeña parte del problema pero una gran parte de la solución, según la RIA. El ferrocarril es una de las formas de transporte más ecológicas, ya que sólo contribuye con un punto cuatro por ciento a las emisiones del transporte a pesar de transportar el diez por ciento de todos los viajes y representar menos del uno por ciento de todas las emisiones del Reino Unido. Como todo el mundo sabe, un solo tren de mercancías elimina hasta 76 camiones de las carreteras, lo que reduce significativamente las emisiones de carbono.
No se alcanzarán los objetivos
El ferrocarril cuenta con un excelente historial de sostenibilidad medioambiental, pero también tiene potencial para conseguir aún más, afirma la RIA en su documento. «El sector necesita que el Gobierno acelere sus planes de descarbonización». La insuficiente inversión en electrificación y nuevas tecnologías de tracción, como el hidrógeno y las baterías, significa que los objetivos del Gobierno de eliminar todos los trenes diésel para 2040 y lograr un ferrocarril totalmente «Net Zero» para 2050 están abocados a incumplirse».
Principales conclusiones del estudio:
- Costes: A lo largo de la vida de un tren, la explotación de un ferrocarril eléctrico es la más barata, incluso teniendo en cuenta los costes de construcción de la electrificación. Se ahorran entre dos y tres millones de libras por vehículo (2,4 – 3,6 millones de euros);
- Fiabilidad: Los trenes eléctricos son entre un 40% y un 300% más fiables que los diesel;
- Eficacia: Los trenes eléctricos son tres veces más eficientes que los diésel o de hidrógeno. Reducción de la demanda energética;
- Duración del trayecto y capacidad: Los trenes eléctricos aceleran más rápidamente, permitiendo más trenes y capacidad en una ruta; y
- Transporte de mercancías: Los trenes eléctricos de mercancías son más rápidos y largos, lo que permite retirar más camiones de las carreteras y aumentar la capacidad de transporte de pasajeros.
«Como parte de la campaña RailDecarb23 de RIA, pedimos al Gobierno que acelere drásticamente el ritmo de la electrificación ferroviaria», declaró David Clarke, Director Técnico de RIA. «Hacerlo será esencial si queremos eliminar todos los trenes diésel de la red para 2040 y conseguir un ferrocarril Net Zero para 2050. Lo lamentable es que estos objetivos van a incumplirse, ya que el ritmo y la trayectoria de la electrificación ferroviaria son sencillamente inadecuados. Las estadísticas oficiales muestran que en 2021/22 sólo se electrificaron 2,2 km de ferrocarril.
La RIA no es ni mucho menos la única que pide al Gobierno que intensifique su programa de descarbonización. Un reciente informe de la Comisión de Transportes(Fuelling the future: motive power and connectivity) afirma que los ministros deben acelerar los avances en la electrificación de las líneas ferroviarias del Reino Unido y publicar una estrategia a largo plazo para la descarbonización de la red ferroviaria. El Instituto Colegiado de Logística y Transporte del Reino Unido (CILT) ha elaborado una hoja de ruta en la que se expone cómo podría electrificarse el 95% de las operaciones de transporte de mercancías por ferrocarril para mediados de la década de 2040 a un coste inferior en comparación con los planes recientes.
