Una nueva asociación entre cuatro países acerca el Corredor Medio a Europa

Los ministros de Transporte de Turquía, Bulgaria, Serbia y Hungría han creado un consejo de coordinación cuadrilateral y un grupo de trabajo sobre transporte ferroviario. Su objetivo es invertir conjuntamente en infraestructuras ferroviarias y desarrollarlas, centrándose en el transporte de mercancías. Como subrayó el ministro turco de Transportes, Adil Karaismailoğlu, los socios aspiran a convertirse en «líderes logísticos regionales y mundiales», y el Corredor Medio de la Ruta de la Seda desempeñará un papel en ello.

«El grupo de trabajo abordará las infraestructuras ferroviarias y el transporte ecológico en consonancia con los objetivos de la UE e intentará tomar decisiones rápidas e implantarlas aún más rápidamente», añadió Karaismailoğlu. Por su parte, el ministro serbio de Transportes, Tomislav Momirović, afirmó que «por primera vez, celebramos una reunión cuadrilateral con colegas de Hungría, Bulgaria y Turquía para crear un consejo y un grupo de trabajo que supervisará todas las inversiones en infraestructuras, principalmente en el sector ferroviario.»

«Beneficiar a nuestros países y al mundo»

«Queremos poner en marcha nuestros planes para un transporte ecológico, que afectará al futuro no sólo de nuestros países, sino también de nuestro mundo. Queremos eliminar los cuellos de botella del transporte y establecer una red de transporte más eficaz y eficiente», comentó Karaismailoğlu, que ve a Turquía y a la región de los Balcanes convertidas en la espina dorsal del transporte euroasiático.

No dejó pasar la oportunidad de mencionar los crecientes volúmenes a través del Corredor Medio, que últimamente se ha convertido en la principal ruta ferroviaria para el tráfico Asia-Europa. Aunque el tráfico ferroviario a través de Rusia vuelva a los volúmenes de antes de la guerra, está convencido de que el Corredor Medio está aquí para quedarse, ya que ofrece los mejores tiempos de tránsito, también en comparación con las rutas marítimas.

«Tenemos serias responsabilidades para desarrollar el comercio y aumentar la eficacia de acuerdo con el Corredor Medio», declararon los cuatro ministros que componen el consejo cuadrilateral al que informará el grupo de trabajo conjunto. Este es el contexto en el que cooperarán Turquía, Serbia, Bulgaria y Hungría. Al igual que los miembros del Corredor Medio colaboran estrechamente para desarrollar la ruta, el objetivo de los cuatro socios será ampliar esta cooperación en suelo europeo.

Primeros pasos prácticos ya dados

En cuanto a los proyectos de infraestructuras e inversiones que acercarán a los cuatro países al establecimiento de un corredor de transporte ferroviario eficaz, la línea de alta velocidad Kapikule-Halkali puede considerarse el primer paso en esta dirección. «Es una inversión enfocada a la integración internacional», dijo Karaismailoğlu, que espera que la línea se coordine con los desarrollos en el resto de los países una vez finalizada.

El proyecto Halkalı – Kapikule, cuya finalización está prevista para este año, vio el primer procedimiento de soldadura a mediados de junio. Hay varias razones por las que esta línea ferroviaria se considera un proyecto especial. En primer lugar, forma parte de la Nueva Ruta de la Seda, en la que Turquía ve crecer su papel como país de tránsito.

Sin embargo, no es un mero proyecto turco. Europa está igualmente interesada en la línea ferroviaria. Por ello, la UE y Turquía han acordado un plan de inversiones. La UE financia el tramo desde Kapikule, cerca de la frontera búlgara, hasta Cerkezkoy con una subvención de 25 millones. El tramo Cerkezkoy-Halkalı, que conecta con la ciudad de Estambul, está financiado por el gobierno turco y cuesta 278 millones.

La línea ferroviaria permitirá la circulación de trenes a una velocidad de 200 kilómetros por hora. A diferencia de la mayoría de los proyectos de alta velocidad, que se limitan a la circulación de pasajeros, esta línea ferroviaria está ahí para impulsar igualmente el tráfico ferroviario de mercancías. El Gobierno ha manifestado su ambición de aumentar el reparto modal del ferrocarril del 5% actual al 22% en 2053. Según diversas fuentes, el transporte de mercancías por la línea pasará de 1,53 millones de toneladas a 9,6 millones al año. El tráfico de pasajeros debería pasar de los 600.000 actuales a 3,4 millones al año.

Lea también:

• Una línea de alta velocidad de Bulgaria a Estambul, también para mercancías

• Grecia-Bulgaria comparten planes para una nueva línea ferroviaria y un nudo de comunicaciones