Declaración del sector: «Las inversiones de la UE son prioritarias para la aplicación del CAD

El sector del transporte ferroviario de mercancías tiende la mano a Bruselas para abordar la apremiante cuestión de la implantación del Acoplamiento Digital Automático (DAC) a escala europea. Las principales asociaciones y sus miembros envían un mensaje claro: la UE debe racionalizar las inversiones del sector público para la transición, el DAC debe definirse claramente, armonizarse y probarse intensamente antes de su implantación, y una entidad europea centralizada de gestión del despliegue debe supervisar todo el proceso.

El sector del transporte de mercancías por ferrocarril acoge con gran satisfacción la muy discutida implantación del DAC a nivel europeo para 2030. Sin embargo, recientemente el debate también ha suscitado algunos puntos de preocupación, con voces de la industria que subrayan que el sector no está preparado para la transición en 2030.

Esto se debe a que la tecnología DAC no se ha probado lo suficiente como para garantizar unas operaciones fluidas y seguras. Al mismo tiempo, los costes de la transición siguen cubiertos por una capa de niebla, y los operadores, por ejemplo, se preguntan si pueden permitirse la costosa transición de sus flotas del acoplamiento manual al DAC.

Como respuesta a la ambigüedad, el sector elaboró una declaración conjunta liderada por asociaciones como CER, UNIFE, UIRR y FEDECRAIL y respaldada por actores clave del sector como ÖBB Rail Cargo Group, DB Cargo, Lineas, Knorr-Bremse, Alstom, SBB Cargo y Siemens, entre otros. Los socios promotores también enviaron cartas a la Comisaria Adina Valean para expresar su apoyo a la declaración sectorial y a las propuestas que incluye.

Financiación segura

El sector reconoció unánimemente la necesidad de coordinar la financiación a nivel europeo para que el CAD pueda ponerse en marcha y aplicarse con éxito. «El mercado por sí solo no puede soportar semejante transformación, y ninguna empresa podrá reunir por sí sola las inversiones de capital necesarias para tal empeño, porque se trata ante todo de un tipo de inversión a escala europea», reza la declaración.

En consecuencia, la exigencia es clara y unánime: la transición al CAD no puede llevarse a cabo únicamente mediante financiación privada porque, en primer lugar, es costosa y, en segundo lugar, el proyecto forma parte de un intento más amplio de la UE por hacer más ecológico su sector del transporte. Por ello, Bruselas debe presentar un plan de financiación suficiente. «Debe garantizarse un plan de financiación europeo único y no discriminatorio, establecido conjuntamente por la CE y los países de la UE y de fuera de ella, para todo el periodo de migración del CAD, que cubra la modernización de los vagones y locomotoras existentes y otros gastos operativos y relacionados con los activos relacionados con la introducción del CAD», subraya la declaración conjunta.

Un plan seguro y realista

Muchos agentes del sector han expresado abiertamente su escepticismo sobre la seguridad o no del uso del DAC sólo con las pruebas realizadas hasta ahora. En consecuencia, la única forma de avanzar es eliminando tales preocupaciones mediante la realización de pruebas exhaustivas y la validación de los resultados en condiciones reales de funcionamiento. La migración sólo debería producirse si los resultados de las pruebas demuestran que el producto DAC final ofrece los beneficios esperados. Antes de proceder a las pruebas, sin embargo, es crucial definir qué es el DAC, sus tecnologías y procedimientos operativos.

Tras el periodo de pruebas, hay que dar pasos adicionales: por ejemplo, el sector pide que la Agencia Ferroviaria Europea participe en el proceso facilitando los certificados de autorización pertinentes para el material rodante, al tiempo que se tiene en cuenta la disponibilidad de la flota durante este proceso.

Una vez que todo se desarrolle correctamente, vendrá la migración al nuevo sistema de acoplamiento. Los representantes del sector subrayaron que la única manera de que la migración tenga éxito es «un plan realista y sólido acordado por todos los actores y en estrecha colaboración con los países de la UE y de fuera de ella». Además, la migración debe incluir un periodo de transición en el que coexistan el acoplamiento de tornillos y el CAD, para que la transición sea más gradual y llevadera para los operadores.

Garantizar una coordinación adecuada

La declaración del sector también define tres pasos que la UE debería seguir para que la transición al DAC sea un éxito. Según los firmantes, el periodo comprendido entre 2023-2028 debe aprovecharse para crear un marco jurídico y presupuestario adecuado. El periodo 2025-2028 se define como el periodo de predespliegue del CAD. Estos tres años servirán como periodo intensivo de pruebas del DAC en toda Europa, «con unos 100 trenes de predespliegue para preparar una migración con éxito e iniciar la industrialización del DAC». Los costes totales de las pruebas se estiman en 210 millones de euros.

A partir de ahí, y de 2028 en adelante, el sector entrará en el periodo de Despliegue del DAC, en el que éste empezará a implantarse a gran escala dada la financiación necesaria, que se estima en unos 13.000 millones de euros. En este caso, uno de los aspectos más importantes es la gestión de todo el proceso. Los firmantes insisten en la creación de una Entidad Europea de Gestión del Despliegue centralizada que supervise la transición y garantice al mismo tiempo una comunicación adecuada con la UE y los Estados miembros.

Este artículo ha sido traducido automáticamente del original en inglés al español.

Autor/a Nikos Papatolios

Fuente: RailFreight.com