La huelga ferroviaria en EE.UU. podría producirse a principios de diciembre

Uno de los mayores sindicatos ferroviarios de Estados Unidos, la Brotherhood of Railroad Signalmen (BRS), está dispuesta a ir a la huelga ya el 5 de diciembre. Otros tres sindicatos han fijado el 9 de diciembre como fecha límite para el inicio de la huelga. La Asociación de Ferrocarriles Americanos (AAR) calcula que una huelga de estas proporciones podría costar a la economía nacional hasta dos mil millones de euros al día.

Los otros tres sindicatos son la Brotherhood of Maintenance of Way Employes Division of the International Brotherhood of Teamsters (BMWED-IBT), la International Brotherhood of Boilermakers (IBB) y SMART-TD, que representa a los trabajadores de Amtrak.

Un tercio de los sindicatos ferroviarios estadounidenses rechazaron el acuerdo

Estos cuatro sindicatos ferroviarios estadounidenses, de un total de doce, han rechazado el acuerdo laboral negociado por la Casa Blanca el 15 de septiembre. BMWED-IBT, el tercer sindicato ferroviario de mercancías del país, votó en contra de la propuesta del Gobierno ya en octubre, convirtiéndose en la primera asociación en rechazarla. BRS siguió su ejemplo a principios de noviembre e IBB se unió el 14 de noviembre. A principios de esta semana, SMART-TD, se convirtió en el cuarto sindicato en rechazar la propuesta.

La propuesta del Gobierno VS las reivindicaciones del sector

La propuesta de acuerdo presentada por la Casa Blanca incluía un aumento salarial del 24% en el quinquenio 2020-2024, tal y como reclamaba AAR. Sin embargo, los trabajadores ferroviarios de Estados Unidos amenazan con estas huelgas porque exigen mejores condiciones de calidad de vida, como destaca BMWED-IBT.

Más concretamente, piden una baja por enfermedad remunerada, que actualmente no se les aplica. Como señaló Micheal Baldwin, presidente de BRS, en una entrevista concedida a Fox Business, los trabajadores ni siquiera cobraron cuando se vieron obligados a permanecer en cuarentena debido a las medidas de COVID-19. Baldwin señaló que una huelga podría afectar significativamente a la economía estadounidense, especialmente en lo que se refiere al transporte de productos químicos y agrícolas. Como ejemplo, destacó cómo las granjas de pollos californianas pueden encontrarse sin alimento para el ganado.

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Este artículo ha sido traducido automáticamente del original en inglés al español.

Autor/a Marco Raimondi

Fuente: RailFreight.com