Estonian Operail pide bajar las tarifas del carbón para impulsar el volumen de carga
En junio, el operador de transporte de mercancías estonio Operail solicitó a los Ferrocarriles Estonios tarifas más baratas para el carbón procedente de Kazajstán. La petición, aceptada por EVR, consiste en reducir a la mitad la tarifa actual, de 2,2 euros por tonelada a 1,1 euros.
Operail afirma que puede mover entre 30.000 y 50.000 toneladas de carbón de Kazajstán al mes. La introducción de la nueva tasa permitirá a la empresa aplicar precios más competitivos a sus clientes. Los ferrocarriles letones, por ejemplo, cobran entre 6 y 7 euros por tonelada a sus clientes, que es lo que pretende Operail.
El plan de Estonia
EVR espera obtener 30.000 euros por cada 30.000 toneladas de carbón de Kazajstán. Debido al deterioro de las relaciones entre Rusia y Kazajstán, el transporte de mercancías de carbón a través de la zona del Báltico se hizo más difícil. Rusia aún podría aplicar restricciones y bloquear los trenes de mercancías con destino a Estonia, como ocurrió con Letonia.
Además, Estonia ya no puede manejar grandes cantidades de carbón en sus terminales de carga. Los bloqueos rusos «no impedirán que Kazajstán exporte carbón, pero tendrán que encontrar nuevos corredores comerciales en cooperación con Rusia», declaró Raul Toomsalu, presidente del consejo de administración de Operail, a la radiotelevisión pública estonia ERR.
Sin embargo, según declaró a ERR Arthur Raichmann, responsable de comercio de los Ferrocarriles Estonios, los acuerdos de precios son un primer paso positivo, ya que es probable que Estonia reciba algo de carbón. La tarifa más barata se mantendrá hasta el final del actual calendario operativo. Después habrá un análisis de los resultados que permitirá tomar nuevas decisiones.
Estonia puede contar con dos terminales para manipular el carbón. Una más grande en el puerto de Muuga, capaz de manipular 50.000 toneladas de carbón al mes, y otra más pequeña en Sillamäe. Otra terminal del puerto de Muuga, Stivis AS, puede reconvertirse para recibir carbón.
El impacto de la guerra
Los volúmenes de transporte de mercancías por ferrocarril en Estonia se precipitaron un 60% tras la aplicación de las sanciones a Rusia. En consecuencia, Operail ha recurrido recientemente a China y Asia Central (Kazajstán, Uzbekistán y Turkmenistán) para compensar las pérdidas causadas por las sanciones de la UE.
Transportar materias primas desde China es más caro que hacerlo desde Asia Central. Además, no hay una demanda significativa de mercancías para enviar a China, lo que complica aún más la relación comercial. Hace tres meses, EVR solicitó una ayuda financiera estatal adicional de 10 millones de euros para recuperarse de las pérdidas causadas por la guerra.
La situación báltica
Estonia no es el único país báltico afectado por las consecuencias de la guerra en Ucrania.
Letonia ha experimentado un descenso del tráfico de mercancías procedentes de Rusia y Bielorrusia, lo que ha obligado a los Ferrocarriles Letones a rescindir 600 contratos de trabajo. En cambio, ha aumentado el tráfico de mercancías procedente de Asia Central, especialmente Kazajstán.
En cuanto a Lituania, los Ferrocarriles Lituanos también se vieron obligados a despedir a unos 2.000 empleados para hacer frente a las crecientes pérdidas financieras. LTG prevé que el impacto de la guerra en el tráfico de mercancías supondrá unas pérdidas de 150 millones de euros. La empresa está intentando introducir servicios más atractivos con bajadas de las tarifas de flete y nuevas rutas a Alemania y Polonia.
Lea también:
- Los ferrocarriles letones temen el grave impacto de la caída de volúmenes
- Los ferrocarriles estonios necesitan una inyección financiera estatal adicional
- A pesar de los esfuerzos, las sombrías condiciones del mercado obligan a LTG a despedir empleados
- Letonia registra un sorprendente aumento de la carga en tránsito procedente de Asia Central