METRANS duplicará con creces el tráfico de la Nueva Ruta de la Seda en 2020
En 2020, METRANS ha aumentado en un 114% el número de trenes de contenedores que viajan entre Europa y China. Y ello a pesar de la pandemia. Según la filial de HHLA, la pandemia de coronavirus y los consiguientes cuellos de botella de capacidad en el transporte marítimo han dado un impulso añadido a las conexiones de transporte ferroviario.
El volumen y la frecuencia del tráfico ferroviario de mercancías entre Asia y Europa han aumentado considerablemente en los últimos años. Según las estimaciones de la consultora de gestión Roland Berger, en 2020 se transportarán unos 878.000 TEU por los distintos corredores ferroviarios de la Nueva Ruta de la Seda. La organización ferroviaria internacional UIC estima que esta cifra podría duplicarse de aquí a 2025.
El crecimiento continuó en el primer trimestre de este año. Según la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China, en el primer trimestre se transportaron 322.000 TEU de mercancías entre Europa y China, lo que supone un aumento interanual del 75%. La mayor parte de este tráfico sigue siendo en dirección oeste. En el primer trimestre, 1.858 trenes partieron en dirección oeste con 182.000 TEU de mercancías, mientras que 1.540 trenes regresaron, con 140.000 TEU de mercancías.
METRANS recoge los beneficios
Como uno de los principales operadores a lo largo de la Nueva Ruta de la Seda, METRANS ha podido cosechar los beneficios de esta tendencia positiva. Los volúmenes de transporte de METRANS en la Nueva Ruta de la Seda son de aproximadamente 30.000 TEU. La empresa intermodal operó 913 trenes en 2020, en ambas direcciones. En comparación, operó 426 trenes un año antes, lo que supone un aumento del 114%. También para METRANS, el tráfico en dirección oeste supuso el mayor crecimiento: un 131%.
METRANS opera entre 60 y 80 trenes al mes entre China y Europa. Junto con sus socios, monta los trenes en bloque en centros chinos como Zhengzhou, Xi’an y Jinhua. A continuación, los operadores de tracción se hacen cargo de los trenes en los distintos nudos del corredor ferroviario euroasiático. Estos nudos son la terminal fronteriza polaca de Malaszewicze (cerca de la ciudad bielorrusa de Brest) y la terminal eslovaca de Dobra (cerca de la frontera ucraniana).
A continuación, los contenedores se distribuyen por toda la red de METRANS. Los centros clave para los flujos de carga ferroviaria entre Europa y China por METRANS son sus terminales centrales de Budapest, Praga, Ceska Trebova, Poznań y Dunajska Streda.
