«Simplificar las ayudas estatales está muy bien, pero cuidado con la competencia interna»
La intención de la Comisión Europea de simplificar las normas sobre ayudas estatales al transporte ecológico podría beneficiar directamente al ferrocarril, lo cual es muy importante. Sin embargo, a la hora de conceder subvenciones y financiación, la Comisión y los Estados miembros deben extremar la cautela porque el dinero destinado a ayudas podría acabar distorsionando la competencia interna del mercado del transporte de mercancías por ferrocarril.
«Las ayudas estatales legítimas para una actividad no deben crear distorsiones de la competencia en otros segmentos del mercado del transporte ferroviario de mercancías», afirma la Asociación Europea de Transporte Ferroviario de Mercancías (ERFA). «Es importante que las empresas de transporte de mercancías por ferrocarril cuestionadas que compiten con las compañías ferroviarias nacionales confíen en que el aumento de las ayudas estatales no distorsionará la competencia», subrayó el presidente de ERFA, Dirk Stahl.
Sin duda, ERFA hizo sonar la campana del peligro por una noticia que fue acogida positivamente. Y esto no ocurrió por casualidad. Al contrario, la asociación tiene buenas razones para subrayar los riesgos inminentes de una competencia distorsionada entre las empresas de transporte de mercancías por ferrocarril.
Tomemos, por ejemplo, la situación de Alemania y DB Cargo que la Comisión investiga en relación con la ayuda estatal que recibió en los últimos años. Según sus críticos, el apoyo financiero que DB Cargo recibe del Gobierno permite a la empresa invertir en su crecimiento y expansión, lo que sería imposible de otro modo.
Sin embargo, y esta es la razón por la que DB está bajo la lupa, las actuales normas sobre ayudas estatales de la UE dictan que la intervención pública no se considera ayuda estatal si se acepta en condiciones de mercado. En tal caso, y en virtud del artículo 107 del Tratado de Funcionamiento de la UE, la ayuda estatal a una empresa se considera financieramente ventajosa frente a sus competidores.
Estas son las condiciones que el ERFA quiere evitar crear para las empresas ferroviarias más pequeñas que no pueden competir con los grandes operadores nacionales. Las ayudas estatales simplificadas sólo tendrían impacto y serían beneficiosas para el ferrocarril en su conjunto «siempre que se basen en procedimientos abiertos, transparentes y no discriminatorios y en condiciones claras de compatibilidad», subraya la asociación.
Ayudas estatales simplificadas
El 6 de julio, la Comisión Europea propuso un reglamento que introduce normas para simplificar los procedimientos de ayuda estatal al transporte ecológico. Al simplificar las normas de concesión de ayudas estatales, la Comisión básicamente permite a los Estados miembros definir y elegir los proyectos o sectores que necesitan financiación y subvenciones sin «la obligación de notificar previamente a la Comisión las medidas de ayuda».
«Esto proporcionará seguridad jurídica, simplificará los procedimientos y reducirá la burocracia para los Estados miembros, al tiempo que permitirá a la Comisión centrar su control de las ayudas estatales en los casos potencialmente más distorsionadores. Además, esto permitirá al sector del transporte abrazar la transición ecológica y digital en consonancia con los objetivos estratégicos de la UE», dijo la Comisión.
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