Rusia, Hungría y Austria crean una empresa conjunta en la Nueva Ruta de la Seda
Rusia, Hungría y Austria han constituido una empresa conjunta que asumirá el papel de transitario y proveedor logístico en la Nueva Ruta de la Seda. La asociación está formada por Russian Railways Holding, CER Cargo Holding (Hungría) y Rail Cargo Group (Austria) y se firmó el martes 14 de diciembre en Budapest.
El equipo recién formado se centrará en el transporte de mercancías desde las provincias chinas al sur de Europa y los países balcánicos, a través de Rusia y Hungría y hacia atrás. La ruta a través de Ucrania será de especial importancia, ya que sirve a esa parte concreta de Europa en el corredor euroasiático.
Socios y política
«Juntos -como tres socios fuertes y con el apoyo de la política- haremos aún más atractivo el transporte ferroviario por la Nueva Ruta de la Seda. En concreto, transformaremos la ruta a través de Ucrania y Hungría en un segundo eje principal que conduzca a una nueva capacidad, tiempos de transporte rápidos y una distribución posterior eficiente en Europa», declaró Clemens Först en un post de Linkedin.
Con política se refiere probablemente al Ministerio de Transportes ruso, que apoyó la empresa conjunta. Russian Railways es una empresa estatal, e indicó que la empresa conjunta es uno de los elementos de la estrategia comercial exterior de JSC Russian Railways.
Hungría vuelve al mapa
También en Hungría, la conexión hacia y desde China a través de Ucrania es un punto importante en la agenda tanto de los políticos como de la industria. Todas las miradas se centran actualmente en la zona fronteriza de Záhony, que en su día fue un animado paso fronterizo con un gran volumen de mercancías por ferrocarril, pero que ha estado descuidada durante los últimos 30 años. Con la nueva terminal East West Gate y la mejora de las infraestructuras, la situación va a cambiar.
«Nuestro objetivo es establecer un sistema moderno de conexiones transfronterizas en Europa Central. Conectando los centros de las regiones entre sí, podremos dar un impulso a nuestras economías, pero también apoyar la evolución de las conexiones comerciales. Es imperativo que el flujo de tráfico entre nosotros y los países vecinos sea más fácil y rápido. Ello requiere una ejecución coordinada de proyectos internacionales interiores y también transfronterizos», declaró Levente Magyar, viceministro de Asuntos Exteriores y Comercio de Hungría, en una entrevista concedida a RailFreight.com.
Puerta Este-Oeste
Los expertos en logística coinciden en que la nueva terminal desempeñará un papel importante. La terminal East West Gate, que entrará en funcionamiento en la primavera del año que viene, podría ser en teoría la mayor terminal intermodal de Europa, si las mejoras de las infraestructuras en Hungría se completan según lo previsto. La antaño descuidada zona de Záhony podría convertirse entonces en un nuevo centro de transbordo para los flujos de tráfico euroasiático con origen y destino en el sur de Europa y los Balcanes.
«Los nudos de transporte de mercancías del norte de Europa (también conocidos como «puertos interiores ferroviarios») entre Asia y Europa casi han alcanzado su capacidad máxima. Por ello, la UE necesita esta cooperación con Ucrania para reabrir el corredor meridional de mercancías hacia Europa Central y los Balcanes», afirmó Magyar.
Las empresas conjuntas y su fuerza
Las empresas conjuntas no son infrecuentes en la Nueva Ruta de la Seda. El mejor ejemplo es el de UTLC ERA, una empresa conjunta de los Ferrocarriles Rusos, los Ferrocarriles de Kazajstán y Belinertrans, la compañía ferroviaria de Bielorrusia. Al tratarse de los países de tránsito más importantes de la ruta principal entre Europa y China, su cooperación es crucial. Como empresa conjunta, UTLC ERAt transporta el 90% de toda la carga en tránsito entre China y Europa.
«No sería mala idea que se formara una cooperación similar en Europa; una UTLC europea», sugirió el Director General de la empresa Alexey Grom en la Cumbre Europea de la Ruta de la Seda, organizada los días 7 y 8 de diciembre en Ámsterdam. Ahora parece que estos consejos no surgieron de la nada.