La necesidad de un proyecto SPEED en el plan ferroviario del Reino Unido
Una mejora rápida, pragmática y eficaz. Ese es tanto el mensaje como una nueva iniciativa llamada SPEED, respaldada por el Gobierno británico y desarrollada por Network Rail, la agencia británica de gestión de infraestructuras. El proyecto cuenta con el respaldo del Primer Ministro, Boris Johnson, quien afirmó que el Reino Unido está inmerso en el mayor programa de inversión ferroviaria desde la era victoriana, y necesita avanzar más rápido. Johnson afirmó que, dado lo anticuado de las infraestructuras británicas, la inversión en ferrocarril es fundamental para la recuperación económica del Reino Unido y para cumplir su programa de «reconstruir mejor».
Johnson fue respaldado por su ministro de Ferrocarriles, Chris Heaton-Harris, quien confirmó la declaración de su colega de Gobierno. Ambos representantes del de Westminster hablaban ante una audiencia en línea de más de 2.400 profesionales del sector, reunidos por la Asociación de la Industria Ferroviaria. La RIA, organismo que representa a la cadena de suministro en general, ha acogido el proyecto SPEED como medio de acelerar la ejecución de proyectos ferroviarios, como la preparación para el tráfico mixto de la línea de Ashington, en el noreste de Inglaterra, y la construcción de una línea rehabilitada en Devon, en el suroeste de Inglaterra.
Modernización de nuestra red
El Primer Ministro Boris Johnson lleva haciendo campaña desde el principio de la pandemia para reactivar la economía británica, bajo su lema general de «reconstruir mejor». El discurso en línea, pronunciado el viernes, fue una oportunidad para que su ministro de Ferrocarriles, Chris Heaton-Harris, esbozara un compromiso con el desarrollo ferroviario. «El ferrocarril es absolutamente fundamental. Las empresas no pueden competir y prosperar si es difícil que las mercancías circulen por el país. Por eso tenemos la obligación y el imperativo empresarial de seguir adelante con la modernización de nuestra red», declaró.
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Se ha puesto en marcha un programa de sesiones informativas para el personal de Network Rail y el sector ferroviario en general. Para ello, el Proyecto SPEED se ha dotado de diez indicadores clave para conseguir lo que el Gobierno denomina un desarrollo ferroviario del Reino Unido más asequible y rápido.
Plan de diez puntos
SPEED abarca diez puntos:
- Consentimiento de planificación y permisos medioambientales
- Gobernanza (el proceso de revisión)
- Garantía (de las obras realizadas)
- PACE y Optioneering
- Calendario (planificación de proyectos)
- Procesos de contratación
- Interoperabilidad y normas
- Acceso y posesión (de terrenos y vías férreas)
- Capacidad y cultura
- Cultura de equipo único (dirigida conjuntamente a Network Rail, el Departamento de Transportes del Gobierno y el sector en general)
PACE es el acrónimo más reciente: «Project Acceleration in a Controlled Environment» (aceleración de proyectos en un entorno controlado). Se trata de un concepto diseñado para sustituir al actual marco «GRIP» (Governance for Railway Investment Projects), ampliamente reconocido como rígido e inflexible, y un proceso engorroso, que a menudo da lugar a la duplicación de esfuerzos.
Mitad de tiempo y reducción de costes
Heaton-Harris se refirió concretamente a dos proyectos, en extremos opuestos del país. En la línea de Ashington y Newcastle -que conecta varias antiguas ciudades industriales con la mayor ciudad del noreste- se reintroducirá el tráfico mixto en una línea de mercancías ya existente. Ello exigirá importantes mejoras de capacidad e infraestructura para dar cabida a un servicio de pasajeros cada media hora, junto con los flujos de mercancías existentes y previstos. El ministro subrayó que el ferrocarril desempeñará un papel vital en la recuperación económica del Reino Unido, siempre que demuestre su rentabilidad. «Crearemos un ferrocarril más robusto y resistente, mejor preparado para los retos del futuro».
Un proyecto que puede resultar más difícil por la intención del ministro de reducir a la mitad el plazo de finalización al tiempo que se recortan los costes es el restablecimiento de la línea hacia el oeste desde Okehampton, a través de Dartmoor, en el suroeste de Inglaterra. Cuando esté terminada, la línea constituirá una sólida alternativa a la ruta costera, famosa y repetidamente arrasada por el dique de Dawlish en las recientes tormentas invernales.
Alcance de los proyectos realizables
Esta iniciativa de Network Rail puede cruzarse con las conclusiones del muy retrasado Informe Williams, un examen del sector ferroviario en su conjunto. «Espero que haya mucho de qué hablar en las próximas semanas», dijo Heaton-Harris, sin comprometerse a que se publique en ese plazo.
«El proyecto SPEED está demostrando lo que podemos hacer, lo que es posible cuando trabajamos juntos», afirmó. «Con cientos de proyectos ferroviarios actualmente en marcha en todo el sector, el potencial está absolutamente claro».
La base de pruebas, según el ministro, se demostrará de forma muy visible con lo que ocurra en la línea de Northumberland y en la de Oakhampton. Dijo a los delegados que las próximas semanas y meses mostrarán el alcance de los proyectos realizables. Con la revisión Williams, la revisión de la conectividad de la Unión y una serie de declaraciones del Gobierno, incluido el presupuesto del Reino Unido de esta semana, hay mucha necesidad de velocidad.
La reducción de costes a medida que el ferrocarril avanza será uno de los temas de RailTech Europe 2021, que se celebrará del 30 de marzo al 1 de abril.) Ya está abierto el plazo de inscripción.