Los daños de las inundaciones en el transporte ferroviario de mercancías son inmensos
Puede que el ferrocarril tenga la clave de las soluciones respetuosas con el clima en el transporte, pero a veces el cambio climático devuelve el golpe al sector. Esta semana, algunas zonas de Europa Central y Oriental se han visto afectadas por fuertes lluvias y las consiguientes inundaciones. Mientras las empresas siguen examinando los daños, la austriaca ÖBB ofrece a RailFreight.com una evaluación preliminar: «Todavía no podemos cuantificar con exactitud los daños aquí. Pero son inmensos».
Las inundaciones han asolado esta semana varias zonas de Europa Central y Oriental. Desde Austria, Chequia, Polonia, Hungría y Rumanía nos llegan mensajes sobre interrupciones del transporte ferroviario. Está claro que el impacto en el transporte de mercancías por ferrocarril es significativo.
«Las condiciones meteorológicas extremas en gran parte de Europa también están teniendo un impacto extremo en el transporte de mercancías», afirma el operador ferroviario austriaco ÖBB en un comunicado. «Las principales rutas y corredores están actualmente bloqueados. Lamentablemente, las previsiones indican que la situación crítica continuará durante varios días más.»
Tráfico detenido
Debido a las inundaciones, muchos trenes se han detenido. ÖBB afirma que «los pasos fronterizos han dejado de funcionar. En Austria, los trenes de tránsito han tenido que detenerse para evitar sobrecargar la red ferroviaria o porque no es posible continuar el viaje.»
«Muchas líneas, ya sean apartaderos industriales o líneas principales, están inundadas. Antes de poder reanudar el tráfico ferroviario, las vías deben someterse a un proceso completo de inspección y mantenimiento por motivos de seguridad, lo que provoca nuevos retrasos», añade el operador ferroviario.
El alcance de los daños por las inundaciones aún no está claro
Un portavoz de ÖBB explica a RailFreight.com que aún se desconoce el alcance exacto de los daños. El agua tiene que retirarse antes de que pueda evaluarse el estado de la infraestructura. Tampoco están claras aún las consecuencias económicas: «Todavía no podemos cuantificar con exactitud los daños. Pero son inmensos».
Los informes que llegan de toda la región sugieren que los daños son realmente importantes. La ciudad checa de Ostrava ha quedado totalmente aislada de la red ferroviaria, y es probable que pase al menos una semana antes de que el tráfico vuelva a la normalidad.
En Rumanía, un tramo de ferrocarril de 5 kilómetros resultó dañado y parcialmente arrasado cerca de Moldavia. El tráfico en varias partes del país quedó suspendido o muy limitado a 20 o 30 kilómetros por hora. Por último, una parte del parque de locomotoras de PKP Cargose inundó en la región meridional polaca de Silesia. Freightliner Polonia publicó en LinkedIn un mapa con las numerosas líneas ferroviarias afectadas por las inundaciones.