¿Qué hará Macron con las vías de acceso al túnel Turín-Lyon?
El debate sobre el ferrocarril Turín-Lyon se encuentra en una fase álgida, ya que Francia no parece muy dispuesta a facilitar vías de acceso al túnel desde Lyon. La semana pasada, 57 senadores franceses enviaron un compromiso al presidente Emmanuel Macron pidiéndole que acelere el proceso burocrático para que el proyecto no pierda su base legal.
Los senadores franceses, unidos bajo el nombre de Unión Parlamentaria por el Lyon-Turín, critican duramente el informe publicado por el Consejo de Orientación de Infraestructuras (COI) a finales de febrero. El COI, órgano consultivo gubernamental dependiente del Ministerio de Transportes, propuso invertir en la modernización del ferrocarril Dijon-Modane antes de dar acceso al túnel desde Lyon. La decisión formal del Gobierno está prevista para junio.
En otras palabras, si el Gobierno sigue las sugerencias del COI, Dijon podría conectarse al túnel antes que Lyon. Esto, como subrayaron los senadores franceses, contradice el acuerdo ratificado por Italia y Francia en 2022 para impulsar el transporte ferroviario transalpino. Según el informe del COI, Lyon podría no tener acceso al túnel antes de 2045, más de 10 años después de su puesta en servicio. Según los senadores, seguir las directrices marcadas por el informe pondría en peligro el éxito del Turín-Lyon.
¿Qué piden los senadores?
Por ello, los senadores piden a Macron que ignore de alguna manera las propuestas del COI y se centre en las vías de acceso que conectan Lyon con el túnel, que se espera esté listo en 2032. Instan al presidente francés a poner en marcha los estudios para un Anteproyecto Detallado (APD), paso indispensable para obtener la prórroga de la Declaración de Utilidad Pública del proyecto hasta 2028. De no ser así, señalan los senadores, la parte francesa de la iniciativa Turín-Lyon perdería su base jurídica y habría que iniciar una nueva investigación pública.
Aparte de los retrasos burocráticos, el aplazamiento del proyecto de vías de acceso al túnel desde Lyon también podría llevar a Francia a perder fondos de la Unión Europea. La UE está dispuesta a cofinanciar el 50% de los costes siempre que los franceses mantengan su compromiso. Si no se solucionan estos retrasos por parte francesa, el país corre un grave riesgo de perder estos fondos. No es la primera vez que personalidades francesas instan a Macron a tomar decisiones sobre el proyecto Turín-Lyon en contra del informe del COI. A finales de marzo, 37 antiguos políticos enviaron una carta al presidente francés en la que le pedían que iniciara la fase APD lo antes posible.
Hay que mencionar que una parte del debate público francés sí está de acuerdo con las propuestas del COI. A principios de enero, más de 150 personalidades públicas francesas firmaron una carta en la que pedían que se detuviera la construcción del túnel ferroviario Turín-Lyon y se reorientaran las inversiones hacia otros trenes y rutas. Los firmantes de esta carta acusan a los promotores del proyecto de haber quintuplicado el número de trenes entre Francia e Italia.
¿Qué quiere hacer el COI?
El informe del COI incluye tres soluciones para las líneas de acceso al túnel Turín-Lyon, que atravesará el monte Cenis entre Francia e Italia. La primera propuesta es la modernización de la línea ferroviaria Dijon-Modane. La línea pasa cerca de Lyon, pero no formaría parte del proyecto Turín-Lyon, ya que sólo se encontraría con este ferrocarril a la entrada del túnel de base internacional, en St-Jean-de-Maurienne. Sin embargo, el COI tiene previsto convertirlo en un acceso francés permanente al túnel transfronterizo. Para este proyecto serán necesarios hasta 600 millones de euros, y su finalización está prevista para 2030. Esto significaría que los estudios y la construcción del tramo francés del Turín-Lyon no empezarían antes de 2028 y 2038, respectivamente.
La segunda propuesta del informe COI es que los estudios para las carreteras de acceso al tramo francés de la Turín-Lyon no comiencen hasta 2028 y la construcción en 2038. Esto significa que estos proyectos no estarán listos antes de 2045, dejando la línea francesa sin vías de acceso cerca de Lyon durante más de diez años. La recomendación final del COI es acelerar las obras de desaturación de la red ferroviaria que rodea Lyon y terminarlas para 2035-2037. Dar prioridad a la línea Dijon-Modane frente a las vías de acceso a Lyon también interferiría en el desarrollo del Corredor Mediterráneo de la RTE-T. La línea Turín-Lyon es el tramo central de este corredor que va de España a Hungría, mientras que la línea Dijon-Modane no forma parte de él en absoluto, como muestra la imagen siguiente.
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