Año Nuevo chino y vino: de Europa a la mesa festiva
Las celebraciones del Año Nuevo chino han llegado a su fin. Las festividades incluían cenas familiares y, como es habitual, el consumo de cantidades justas de alcohol. El vino figura entre los productos preferidos por los chinos, y su transporte desde Europa ocupa un porcentaje relativamente importante de las capacidades del transporte euroasiático. Sin embargo, ¿cómo se transporta el alcohol, y en concreto el vino, en los corredores euroasiáticos por ferrocarril?
Transportar alcohol no es un trabajo corriente. Este tipo de producto suele transportarse en avión, ya que necesita viajes cortos y condiciones controladas. El vino necesita un control continuo de la temperatura y, como se embotella en botellas de vidrio, también requiere medidas de seguridad específicas para llegar intacto a su destino.
China-Europa y el vino
Cuando se trata de transportar vino a larga distancia, los trenes China-Europa tienen mucho que decir. El vino francés e italiano, la cerveza alemana y el licor chino (Wuhan, Luzhou) son habituales en el tren. Ya en octubre de 2016, más de 10.000 botellas de vino francés de Burdeos tomaron el CEB Express en Lyon, en dirección este, y llegaron a Wuhan en solo 16 días. Desde entonces, ha habido una operación regular de trenes del vino en muchas ciudades.
Se informa de que antes de este año, en el Pabellón de Países Europeos (mercancías) del Puerto Ferroviario Internacional de Chengdu de Asia y Rongjiang, la compra de vino francés, champán y otras mercancías de Nochevieja superó la cantidad de 100.000 yuanes. Gracias al desarrollo de los trenes China-Europa, las variedades de vino extranjeras llegan cada vez más al mercado chino por ferrocarril, lo que aporta a este Año Nuevo elementos más exóticos. En octubre de 2019, el licor de especias fuertes «Huanghelou» de Wuhan salió por primera vez de China por las vías del tren hacia Europa. A finales de 2020, los trenes de Chengdu también transportaron el famoso licor Luzhou a ultramar y hacia Europa.
Sin embargo, la importación y exportación de productos alcohólicos depende en distinta medida de los países, y numerosos viajes para transportar vino han estado plagados de dificultades. No obstante, desde la firma del Acuerdo Centroeuropeo sobre Indicaciones Geográficas, el flujo de especialidades alcohólicas desde ambos lados de la frontera es mucho más fácil.
Condiciones de transporte
La mayor parte del vino que viaja entre Europa y China se embotella. El envasado y el entorno de transporte son dos factores críticos para lograr un transporte de larga distancia satisfactorio. Por un lado, con viajes largos y llenos de baches y procesos de carga y descarga durante el tránsito, las frágiles botellas de vidrio deben embalarse adecuadamente para evitar que se rompan por el camino.
En segundo lugar, el tiempo durante los viajes en tren puede ser impredecible. Si la temperatura del contenedor no es estable y adecuada, es probable que las botellas revienten durante el trayecto y sufran daños importantes. Las condiciones meteorológicas extremas también afectan al embalaje especial de algunos vinos, como el corcho, que puede dañarse fácilmente con la humedad o las altas temperaturas. Además, el entorno del contenedor no es propicio para el vino, con humedad y oxidación, lo que provoca el deterioro del producto vinícola.
Forrado con papel de aluminio
El transporte de vino suele realizarse en palés. En las cajas, las botellas se sujetan individualmente en orificios únicos y se les coloca un acolchado de felpa o material térmico para hacer frente a posibles vibraciones y cambios de temperatura durante el trayecto. Además, asegurar la mercancía con correas o palos puede proporcionar protección adicional.
Para transportar vino en botellas de vidrio de forma rentable, los transportistas suelen instalar papel de aluminio en el interior de los contenedores o en palés individuales para que actúe como película termostática. JF Hillebrand Group y Embatuff, especializadas en el transporte de bebidas sensibles a la temperatura, han desarrollado soluciones versátiles y avanzadas para proteger la carga alcohólica en el mercado actual. Las empresas aíslan totalmente sus contenedores y protegen la mercancía de la exposición prolongada o breve al sol durante el transporte, al tiempo que proporcionan un entorno seco e inodoro al contenedor para evitar el moho o el deterioro del alcohol.
La instalación de la lámina se realiza simplemente atando correas (o bandas elásticas) a cada uno de los siete lados del contenedor, excepto la puerta, y luego conectando y fijando la lámina a las correas, de modo que la lámina y la pared interior del contenedor encajen formando un cuerpo de cuatro lados. Para un contenedor de 20 pies, una persona sólo necesita unos 10 minutos para instalarlo de forma independiente. Un contenedor de 40 pies necesita unos 12 minutos y dos personas para el mismo proceso. Aplicar el aislamiento a palés o cajas individuales puede hacerse en pocos minutos.
JF Hillebrand, uno de los desarrolladores de esta solución, utilizó esta película térmica para transportar vino de Duisburgo (Alemania) a China por ferrocarril. Pierre Corvisier, Director de Desarrollo de Servicios e Innovación, lo explicó antes: «Su uso reduce considerablemente la inestabilidad de la caja (la temperatura ambiente oscila entre un mínimo de 9 °C y un máximo de 32 °C). Incluso cuando la temperatura alcanza su máximo, el vino en la botella se mantiene entre 25/29°C. Además, el sistema de seguimiento demostró que, con la protección de este revestimiento, el envase del vino no se rompe durante los tramos más accidentados del viaje a Kazajstán y China».
Tanques de almacenamiento de líquidos
Una parte del vino también se transporta a granel hasta su destino, donde se envasa y se vende. Para este tipo de producto, el mercado utiliza sobre todo cisternas de almacenamiento (Flexitanks), que son depósitos específicamente diseñados para transportar líquidos en contenedores. Gracias a la flexibilidad del Flexitank, cada centímetro de espacio de almacenamiento puede utilizarse de forma eficiente.
En comparación con los IBC (Intermediate Bulk Containers, contenedores intermedios a granel), los Flexitanks pueden transportar un tercio más de producto y garantizar una superficie mínima de residuos al descargarlos. Al mismo tiempo, este depósito de almacenamiento de líquidos se adapta perfectamente al entorno, aislando eficazmente el vino del interior del depósito y el oxígeno del exterior para evitar que se estropee.
Lea también:
- Sin vino a menos de 1 grado, y sin cristales rotos
- Segundo envío de prueba de vino por ferrocarril de Alemania a China