El caos portuario en Europa mantiene en vilo las operaciones de transporte de mercancías por ferrocarril
Los puertos de Hamburgo y Bremerhaven siguen sumidos en el caos tras las continuas huelgas y los problemas de infraestructura, que provocan «consecuencias desastrosas» a operadores como METRANS. Por si fuera poco, los puertos del Adriático también se encontraron con inmensas restricciones de tráfico, que afortunadamente levantó el gestor de infraestructuras esloveno.
A pesar de que las cosas han mejorado para los puertos de Koper y Trieste, la situación de los puertos del norte de Alemania no es similar. Para Koper y Trieste, la cuestión era complicada, pero con una solución sencilla. Hace unos días, el gestor de infraestructuras esloveno anunció la prohibición de cargar mercancías en el territorio del país debido a una sobrecarga.
Como consecuencia, no se podían expedir trenes desde los puertos del Adriático utilizando la red ferroviaria eslovena. Sin embargo, ante la posibilidad de múltiples servicios cancelados y un enorme retraso en los envíos posteriores, el IM esloveno revocó la decisión y permitió a las empresas volver a despachar trenes. Sin embargo, los operadores deben esperar más cancelaciones en Alemania.
Decenas de trenes cancelados
Como ya se ha dicho, los puertos alemanes llevan bastante tiempo atravesando dificultades. Los principales problemas se producen por una combinación de factores que incluyen huelgas, averías de infraestructura que dejan varados los trenes fuera de la infraestructura portuaria e incluso fenómenos naturales como tormentas que cierran las líneas ferroviarias hacia y desde los puertos.
Como resultado, los puertos de Hamburgo y Bremerhaven no consiguieron evitar lo que hicieron los de Trieste y Koper. «Debido a la infraestructura completamente saturada, el acceso al puerto de Hamburgo es limitado. La HPA y las terminales individuales negociarán la aceptación de cada tren con los operadores», explicó METRANS, que sufre gran parte de las molestias.
En concreto, la empresa tiene 18 trenes en cola para entrar en los puertos de Hamburgo y Bremerhaven. Sin embargo, para ello se ve obligada a cancelar o aplazar al menos 18 trenes más a fin de liberar capacidad y equipos para los trenes ya retrasados o cancelados.
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