Pruebas de trenes de 740 metros de longitud en los Países Bajos este verano
DB Cargo y el gestor holandés de infraestructuras ProRail comenzarán a finales de agosto las pruebas con trenes de mercancías de 740 metros de longitud. Esta medida forma parte del paquete de medidas propuesto por el Gobierno holandés la semana pasada para crear unas condiciones equitativas en el sector del transporte de mercancías por ferrocarril.
En la actualidad, la red ferroviaria neerlandesa admite trenes de una longitud máxima de 650 metros. La explotación de trenes más largos permite unos servicios ferroviarios más eficientes y rentables y se considera un motor importante de un sector del transporte de mercancías por ferrocarril más competitivo, de ahí que la facilitación de trenes más largos sea un elemento crucial del plan de acción para el transporte de mercancías por ferrocarril recientemente lanzado en los Países Bajos.
Pruebas
Las pruebas se realizarán en la ruta de Brabante, entre Sloe y Dillingen. La operación será cuidadosamente preparada por ProRail, que analiza de antemano los posibles escenarios y complicaciones que podrían darse en la red. El administrador de infraestructuras también estudia el efecto de los trenes más largos en los cruces ferroviarios y otros obstáculos que puedan surgir cuando los trenes estén en funcionamiento.
La facilitación de trenes más largos es una medida adoptada por muchos países europeos. La vecina Alemania anunció anteriormente que podría ver trenes de 740 metros de longitud en su red a partir de este año. Suecia, Polonia, Suiza, Italia y España realizan esfuerzos similares.
Paquete de medidas
Las medidas propuestas en los Países Bajos llegan tras años de negociaciones con la Spoorgoederentafel, plataforma formada por operadores ferroviarios de mercancías, cargadores, puertos marítimos y el gestor holandés de infraestructuras ferroviarias ProRail. El objetivo es aumentar el volumen de mercancías por ferrocarril hasta 54-61 millones de toneladas en 2030, frente a los 42 millones de 2016.
Además de hacer funcionar trenes más largos, se reducirá la tasa de infraestructura, para lo que se pondrá a disposición una subvención de entre 12 y 14 millones de euros al año, a partir de 2019 y hasta 2023. Además, el Gobierno utilizará fondos nacionales y europeos para facilitar la transición al ERTMS. ProRail espera presentar los resultados de las pruebas con trenes más largos a finales de septiembre.