Una ley de 2016 podría encarecer aún más el transporte ferroviario de mercancías en Alemania

Un estudio reciente revela que el transporte ferroviario local de pasajeros de Alemania podría ahorrar miles de millones de aquí a 2030 gracias a la Ley de Regulación Ferroviaria (ERegG) aprobada en 2016. Sin embargo, este ahorro se produce a expensas de los operadores de transporte de mercancías y de pasajeros de larga distancia, que deben soportar la carga financiera.

El estudio, encargado por la asociación Die Güterbahnen y realizado por el instituto INFRAS, advierte de la creciente presión financiera sobre estos sectores. Si no se aborda, el actual modelo de precios amenaza con agravar la ya tensa situación del sector ferroviario alemán, especialmente en el contexto del aumento de los cánones de acceso a las vías y la introducción del Deutschlandticket.

Miles de millones en juego

Según el estudio, los servicios ferroviarios locales podrían ahorrar hasta 7.000 millones de euros de aquí a 2030, en gran parte gracias a la limitación de precios. Sin embargo, este alivio financiero para los operadores locales sólo es posible si los servicios ferroviarios de mercancías y pasajeros de larga distancia absorben el aumento de los costes. Los operadores de mercancías reclaman una reforma urgente, alegando que el actual sistema de precios es insostenible. Instan a los legisladores a reconsiderar el tope, calificándolo de «cuerpo extraño» en la estructura de precios ferroviarios que traslada injustamente los costes a otros sectores.

Las implicaciones financieras son graves. Entre 2017 y 2022, la limitación del precio de la vía ahorró a los servicios ferroviarios locales aproximadamente 200 millones de euros, transfiriendo estos costes a otros usuarios del ferrocarril. Esto ocurrió durante una época de aumentos relativamente modestos de los costes de infraestructura. Sin embargo, para diciembre de 2024, los servicios ferroviarios de mercancías y de pasajeros de larga distancia podrían enfrentarse a aumentos de precios de acceso a las vías de hasta el 16,2% y el 17,7%, respectivamente, mientras que el aumento del ferrocarril local está limitado a un mero 0,6%. La previsión para 2025 es aún más alarmante, con aumentos de costes potencialmente superiores para los operadores de transporte de mercancías y pasajeros de larga distancia.

«Esta previsión muestra a los políticos lo urgente que es la necesidad de un cambio. En 2016, los estados federales utilizaron el Bundesrat para imponer sus propios intereses mediante la imposición de un límite a los precios de las vías del tren – sin tener en cuenta que esto podría conducir a mayores costes para el transporte de mercancías y de larga distancia», dice la asociación Die Güterbahnen. INFRAS, que ha realizado el estudio, añade: «Este sistema de tarificación de las vías perjudica los objetivos del Gobierno federal en materia de transporte y política climática. […] También corre el riesgo de enfrentar a los operadores ferroviarios entre sí, mientras que los operadores de carretera siguen pagando menos que sus homólogos ferroviarios».